Los mundiales de fútbol siempre nos regalan juegos espectaculares, jugadas maravillosas, entradas duras, fallos increíbles y goles impresionantes. Y a veces también nos ofrecen un festín de goles.
Que un partido mundialista termine a día de hoy con 7 goles o más es muy extraño, aunque ha pasado (el 7-1 de Alemania a Brasil en 2014, por ejemplo). Pero normalmente es la excepción a la regla. Los encuentros hoy son más disputados y las selecciones han acortado sus diferencias entre sí.
Sin embargo, en el pasado esto no era tan así y en las viejas Copas del Mundo se pueden encontrar resultados sorprendentes. Te invitamos a repasar los 3 partidos con más goles en la historia de los Mundiales, en la previa de Qatar 2022.
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Hungría y Alemania se hicieron pedazos en 1954
La Copa del Mundo celebrada en Suiza en 1954 será recordada por varias cosas. Una de ellas es las abultadas goleadas registradas en algunos de los partidos, y otra es el milagro de Berna, en el que Alemania se consagró campeón por primera vez contra todo pronóstico.
Ese torneo dejó al primer campeón sin corona de la historia: Hungría. Los húngaros cayeron derrotados en la final ante los alemanes, pero en fase de grupos los destrozaron con un contundente 8-3. Ese encuentro es uno de los tres que más goles dejó en un Mundial.
Hungría contaba en sus filas con una de las mayores joyas de la historia del deporte: Ferenc Puskas. Pero no solo eso, el aceitado funcionamiento ofensivo de los húngaros hacía presagiar que se quedarían con la Copa del Mundo.
De hecho, se podría decir que esa Hungría fue la predecesora del fútbol total que practicó Holanda 20 años después de la mano de Johan Cruyff. Básicamente, en ese conjunto húngaro todos atacaban y todos defendían.
Desde el punto de vista táctico, los jugadores no tenían una posición concreta en la cancha, sino que intercambiaban posiciones de manera constante, lo que generaba un gran desconcierto en los rivales.
De la mano de Gyula Grosics, Sándor Kocsis, Zoltán Czibor, Józcef Bozsik o Ferenc Puskás y con el entrenador Gusztáv Sebes, Hungría jugó de manera brillante esa Copa del Mundo y lo demostró pisoteando una y otra vez a los rivales con los que se cruzaba.
El 8-3 ante Alemania fue un partido correspondiente a fase de grupos que se disputó en el estadio Saint Jakob, en Basilea. El primer tiempo culminó 3-1 a favor de Hungría. Los goles de los húngaros fueron convertidos por Sándor Kocsis a los 3 y a los 21 minutos y Ferenc Puskas a los 17 minutos. Descontó a los 25 minutos Alfred Pfaff.
El segundo tiempo fue un festín para Hungría. Arrolló a su rival con anotaciones de Nandor Hidegkuti a los 52 y 54 minutos, de Kocsis a los 69 y 78 minutos y de Jozsef Toth a los 75 minutos. Descontaron para los alemanes Helmut Rahn a los 77 y Richard Herrmann a los 84.
Puede que los húngaros no hayan sido campeones, pero desplegaron un juego que significó algo nunca visto en la historia del deporte y que sentó las bases para uno de los mejores equipos de todos los tiempos: la Holanda de 1974.
Brasil y Polonia dejaron un partido electrizante en 1938
Brasileños y polacos jugaron un partido increíble en Francia 1938, correspondiente a los octavos de final de la Copa del Mundo que culminó con un 6-5 para los posteriores pentacampeones. Se jugó en el estadio de la Meinau, en Estrasburgo. Cabe recordar que ese Mundial se jugó bajo el formato de eliminación directa; no había fase de grupos.
El encuentro entre sudamericanos y europeos puede que haya sido el partido más electrizante de la historia de los mundiales: lo terminó ganando Brasil en la prórroga tras un empate a 4 en los 90 minutos.
Los goles del conjunto brasileño en tiempo reglamentario fueron convertidos por Leónidas a los 18 minutos, Romeu a los 25 y Peracio a los 44 y 71. En el caso de los polacos anotaron Szferke a los 23 y Wilimowski a los 53, 59 y 89. Así, los 90 minutos se iban con un increíble 4-4 en el marcador.
El tiempo extra vio como Brasil estiró la ventaja con dos tantos de Leónidas a los 93 y 104. Sobre la hora, a los 118, anotaría nuevamente Wilimowski para Polonia, que se quedaría en la orilla en un partido para la historia.
Como detalle, vale señalar que en este torneo ambas selecciones vestían de blanco por lo que se realizó un sorteo para ver quién tenía que jugar con casacas de otro color. El afectado fue Brasil, que literalmente tuvo una batalla contra el tiempo para conseguir camisetas de color azul, siendo la primera vez que el elenco sudamericano jugó con uniformes azules.
Austria y Suiza hicieron lo que no podrá repetirse
Un 7-5 en un Mundial a día de hoy sería un resultado totalmente alucinante, no solo por lo espectacular, sino porque las selecciones son más fuertes táctica y defensivamente. Pero ese resultado se dio en Suiza 1954 en un encuentro entre Austria y los locales, correspondiente a los cuartos de final y disputado en el estadio de La Pontaise, en Lausana.
Lo increíble de este encuentro es que los 12 goles fueron convertidos en los 90 minutos, con una media de un tanto cada 7 minutos y medio. Fue asombroso ya que los espectadores fueron testigos de una remontada épica de parte del conjunto austríaco.
La selección suiza empezó con una ventaja de 3-0 tras goles de Ballaman a los 16 minutos y de Huegi a los 17 y 19. El partido parecía muy cuesta arriba para los visitantes, pero igual se las arreglaron no solo para empatar sino para pasar por una diferencia de dos tantos.
En solo 14 minutos, Austria convirtió 5 goles: Wagner a los 25 y 27, Koerner a los 26 y 34 y Orwick a los 32. En un abrir y cerrar de ojos se pasó de un contundente 3-0 a un sorpresivo 5-3. Las emociones, de todos modos, no terminarían ahí en el primer tiempo ya que Ballaman descontó para los locales a los 39. Al descanso con un 5-4.
Si bien el segundo tiempo fue más moderado en cuanto a celebraciones se refiere, igual siguieron cayendo goles. Wagner puso el 6-4 a los 53, Huegi volvió a acortar diferencias a los 58 y Probst puso el definitivo 7-5 a los 78.
Existen muchas crónicas de prensa que sostienen que el resultado de ese encuentro, por más increíble que sea, no muestra ni la mitad de las cosas que en verdad sucedieron en los lances del juego.
Con la derrota, Suiza se fue a casa, mientras que Austria avanzó a semifinales, donde perdió ante Alemania por 6-1 en otra espectacular goleada.
Otras grandes goleadas de los Mundiales
En la historia de este maravilloso torneo existieron más partidos con resultados abultados, aunque cada vez menos conforme nos acercamos al tiempo presente.
Otra gran goleada es la inolvidable paliza de Alemania a Brasil en 2014, cuando los sudamericanos fueron locales. Los europeos los despacharon con un impresionante 7-1 en semifinales.
La última gran goleada acaba de ocurrir, en el encuentro España frente a Costa Rica. En este caso fueron los auropeos los que no perdonaron, y le hicieron 7 goles a los ticos, dejándolos deprimidos sobre el campo.
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Los alemanes también cuentan en su haber con otras las grandes goleadas en tiempos modernos: 8-0 a Arabia Saudita en Corea y Japón 2002.
Estos son otros resultados abultados en los Mundiales:
- Hungría 10 – El Salvador 1 (España 1982)
- Francia 7 – Paraguay 3 (Suecia 1958)
- Yugoslavia 9 – Zaire 0 (Alemania 1974)
Y tú, ¿qué otras grandes goleadas de los Mundiales conoces? ¿Crees que en Qatar 2022 veremos otra goleada como la que acaba de realizar España Frente a Costa Rica?
